En mi opinión, el trafico de órganos es una de las formas más fáciles para aquellas personas que están viviendo situaciones muy difíciles y necesitan ganar dinero para poder subsistir, dar de comer a sus hijos u otros motivos muy diversos, como en casos muy extremos, el de comprar droga.
Pero otro hecho que también está presente en este tráfico de órganos y es lo que más debería asustarnos es la posibilidad de robar a niños, o incluso a adultos sus órganos para luego venderlos. Este hecho, aunque parezca sorprendente, es habitual en países como China y Mozambique.
Pero empecemos por el principio, en la Deep Web la zona más oscura de Internet existen muchas páginas donde personas necesitadas hacen publicidad para poder vender sus órganos, como si fuera algo normal. Podemos encontrar todo tipo de órganos a la venta pero el órgano más común son los riñones ya que el ser humano puede vivir con solo uno.
Dentro de este mundo también existen médicos o simplemente aficionados (por llamarlo de algún modo) o incluso médicos que no acabaron sus carreras o han sido despedidos de sus trabajos. Estos montan sus quirófanos en habitaciones completamente fuera de la ley donde no existe ni la higiene ni nada por el estilo. Pienso que tienen que estar pasando por situaciones muy difíciles porque sino estoy segura que no expondrían a todos los peligros que puede llevar la "operación" a la que se someten, o al menos yo no sería capaz de hacerlo.
Un ejemplo común que viven las personas que son secuestradas y cuyos órganos son extraídos suele ser que dicha persona se despierta en una habitación, en una bañera llena de hielo. Comprende que alguien le ha drogado, y encuentra una nota en la que se la informa de que se le ha extraído algún órgano (por ejemplo, los riñones o el hígado) y se le aconseja que llame al servicio de urgencias para que vengan a buscarlo.
Muchos de estos países no quieren reconocer todo este asunto del tráfico de órganos y dicen que solo son leyendas urbanas, pero en la vida real se conocen muchos casos de niños y adultos que han sido drogados y se les han extirpado alguno de sus órganos sin llegarse a dar cuenta.
Hay otros casos en los que gente rica o de clase alta necesita un trasplante y utilizan su dinero para ello; tan solo por salvar su vida, dándole igual lo que le pueda pasar a su posible donante, porque para ellos esta primero su dinero y su salud y nadie más.